martes, diciembre 21, 2010

De vuelta a la redacción... y a la realidad


Después de meses de no escrinir ninguna entrada en mi blog, por razones no ajenas a mí, me atrevo a reiniciar este espacio para análisis, reflexión y compartir ideas.

Siendo hoy 21 de diciembre del 2010, es difícil escoger un tema para comentar. Podría ser alguna noticia de la última semana.

Sólo en México, por ejemplo, el artero asesinato de la Sra. Marisela Escobedo que sólo buscaba justicia por el asesinato de su hija y la incomprensible puesta en libertad del asesino confeso que, según el mismo gobernador de Chihuahua, seguramente es el autor al menos intelectual de este último crimen; al que se añade la ya muerte del hermano de Marisela.

También podría comentar sobre la crónica (casi podría decirse anunciada, aunque sin saber el lugar exacto donde ocurriría) de la explosión de un ducto de gas en San Martín Texmelucan, dejando 27 personas muertas y muchos daños materiales.

O bien, la ansiada liberación del Jefe Diego, regodeo de muchos periodistas por obtener la nota exlusiva.

O la ya llamada "batalla de Apatzingán" donde cae abatido el líder de "La Familia" michoacana, "El Chayo" y el "sorpresivo" respaldo de un puñado de gentes a este cártel y repudio a la Policía Federal

Creo que no abordaré hoy ninguno de ellos en especial.

Sin embargo, el cierre de año trae a la mente también que, pese a que muchos pensaban o deseaban la cadenita 1810-1910-2010, no se dio como tal, aunque no se podrá tampoco olvidar que este año fue marcado por la violencia en este país.

Viene el 2011, habrá muchos temas que en sociedad, política y economía darán de que escribir en este espacio.
A nivel personal, será un año que cambiará el rumbo de mi futuro personal: dejo la Ciudad de México, donde nací y donde también me desarrollé profesionalmente (porque mi formación académica superior fue en Querétaro); y me voy a Monterrey, ciudad este año muy azotada por la violencia, pero en pie de lucha por la gente trabajadora que ahí hay, y a la que le tengo una estima muy especial.

Veremos que sucede. Por lo pronto, espero que la siguiente entrada tenga ya un tema específico. Mientras tanto, ceteris paribus.